Los buñuelos son un entrante muy populares en muchos países. Pueden ser tanto dulces, como salados.
100 gr de queso de bola, 75 gr de jamón de York, 50 gr de mantequilla, 125 gr de harina de fuerza, 2 huevos, aceite de freír, sal, pimienta negra molida.
Cortar el jamón y el queso en dados pequeños. En una cacerola poner 200 ml de agua a calentar a fuego suave. Cuando rompa a hervir, retirar del fuego y añadir la harina. Remover enérgicamente.
Poner de nuevo la cacerola a fuego suave, y sin dejar de remover, mantenerla 2 m. De jardín que enfriar, añadir los huevos y batir. Incorporar el queso, el jamón y la pimienta.
Poner el aceite a calentar en una cacerola a fuego medio. Cuando este caliente, dejar caer porciones de masa del tamaño de una cuchara de café. Freír por ambos lados y escurrir sobre papel absorbente. Servir calientes.