Plato sencillo y sabroso que podemos hacer en muy poco tiempo.
1 kg de calamares, 1 cebolla, 2 dientes de ajo, salsa tereyaki, aceite vegetal, sal.
Limpiar los calamares retirandoles la tripa, la piel y las aletas. Lavarlos y cortarlos en anillas de 1 cm de grosor. Picar las verduras muy menudas.
En una sartén, poner el aceite a calentar a fuego fuerte. Añadir las verduras y freír hasta que cojan color. Agregar los calamares y cocinarlos 2 m. Verter un buen chorro de tereyaki y remover otros 2 m.
Rectificar la sal, si fuera necesario. Servir caliente.
Esta receta la podemos hacer tanto con calamares como con chipirones. Llamamos salsa americana, básicamente a una salsa de tomate un poco picante. Ten a mano un buen pedazo de pan para mojar en la salsa.
300 gr de chipirones, 1 guindilla seca, 1/2 cebolla, 6 dientes de ajo, 1 tomate, aceite de oliva, sal, pimienta negra molida, 100 gr de tomate frito, pimentón dulce, 30 ml de vino blanco, azúcar..
Limpiar los chipirones, quitándoles la piel, la tinta y el ojo. Cortarlos en rodajas. Salpimentar.
En una cacerola poner el aceite a calentar a fuego medio. Agregar los ajos y la cebolla, cortados pequeños. Pochar y añadir los chipirones y la guindilla. Rehogar y regar con el vino. Dejar evaporar 5 m.
Bajar a fuego suave y añadir el tomate y una cucharada de pimentón. Dejar unos 20 m a fuego, hasta que la salsa este ligada. Añadir una pizca de azúcar. Corregir la sal. Servir calientes.
Los calamares a la riojana son uno de los platos emblemáticos de la gastronomía española.
500 gr de calamares en rodajas, 2 cebollas, 6 dientes de ajo, 1 pimiento italiano, 1 tomate, 50 gr de guisantes, laurel, aceite de oliva, sal, cominos, cilantro, pimentón dulce, 300 ml de vino tinto.
En una cacerola poner a calentar el aceite a fuego medio. Añadir la cebolla, el ajo y el pimiento cortados pequeños. Rehogar hasta que estén pochados. Agregar el tomate, el laurel y los guisantes. Rehogar 10 m. Incorporar entonces los calamares y saltear. Agregar el tinto, la sal y las especias. Dejar a fuego suave, hasta que la salsa este reducida. Corregir de sal. Servir calientes.
Los chopitos denominados también en algunas zonas como pulpitos y puntillas son una preparación culinaria típica del interior, y de las costas de España .
500 gr de puntillitas, sal, aceite de freír, harina de freír.
Lavar las puntillitas en agua fría y ponerlas a escurrir para que pierdan liquido. Salar y pasar por harina. Freír en aceite bien caliente, Sacar y escurrir el exceso de aceite con papel absorbente. Servir calientes.
Los sepíidos son un orden de moluscoscefalópodos conocidos con el nombre de sepia, jibia, choco o cachón. Son un ejemplo de la modificación de la concha característica de la mayor parte de los cefalópodos: es sumamente reducida y queda oculta bajo la cara dorsal del cuerpo, cubierta por los pliegues laterales del manto.
1 choco, sal, harina de freír, aceite de freír.
Limpiar el choco con agua fría. Quitarle el ojo y las babas. Separar los tentáculos del cuerpo y partir este ultimo por la mitad y después a lo ancho en tiras de 1.5 cm de grosor. Cortar las patas una a una y el resto en trozos del mismo tamaño que los del cuerpo. Salar. Pasar por harina. Poner a fuego fuerte el aceite a calentar. Freír en el los chocos cuando este bien caliente. Sacar y dejar escurrir para que pierdan el exceso de aceite. Servir calientes.
La manera tradicional de hacer los calamares en el sur de España. Especialmente famosos son Madrid y Granada con su tradicional bocadillo de calamares fritos.
3 calamares grandes, sal, aceite de freír, harina de freír.
Limpiar los calamares, darles la vuelta y cortarlos a lo ancho en aros de 0.5 ml de grosor. Salarlos y pasarlos por harina. Poner el aceite a calentar a fuego bien fuerte. Cuando comience a hervir, añadir los calamares y freír bien. Sacarlos y escurrirlos del aceite sobrante. Servir bien calientes.
Los téutidos son un orden de moluscos cefalópodos conocidos vulgarmente como calamares (debido a su «hueso» calcáreo, conocido como pluma o caña = calamus en latín).
1 k de calamares, 1 L de leche, 2 dientes de ajo, pan rallado, aceite para freír, sal.
Limpiar los calamares, se le retiran las tripas y se lava en abundante agua fría. Una vez limpios se corta en tiras de unos 2 cm de grosor. Sazonarlos y meterlos en la leche, con los dientes de ajo aplastados. Dejarlos reposar unas 6 h, sacarlos de la leche y escurrirlos.
Pasarlos por el pan rallado, poner a calentar el aceite a fuego muy vivo y freírlos hasta que estén dorados.