Aunque los habitantes de la ciudad toman a veces Marsala añejo, el vino producido para exportar es siempre fortificado y parecido al Oporto. Originalmente el Marsala se fortificaba para asegurar que resistiría viajes marítimos largos, pero actualmente se hace debido a su popularidad en el mercado exterior.
1 pechuga de pollo, sal, pimienta blanca molida, una cucharada de demi glace, harina, 200 gr de champiñones, mantequilla, 500 ml de vino Marsala.
Cortar la pechuga en filetes finos. Salpimentarlos. Pasarlos por harina y marcarlos en una sartén en aceite caliente. Sacarlos y reservarlos. En una sartén poner un pellizco de mantequilla a fuego medio. Añadir los champiñones en laminas y marcarlos. Salpimentar y regar con el vino. Dejar reducir 10 m a fuego medio. Añadir entonces los filetes y la demi glace y dejar reducir a fuego suave hasta que la salsa este ligada. Corregir de sal servir caliente.