El espárrago se usa desde tiempos lejanos como una verdura y para la medicina, debido a su sabor delicado y sus propiedades diuréticas. Fueron cultivados por los antiguos egipcios, los griegos y los romanos, los cuales los comieron frescos de temporada y secaban el fruto para su uso en invierno.
1 manojo de espárragos verdes, aceite de oliva, sal.
Coger los espárragos por detras y partirlos con la mano para quitarles la parte blanca que no es comestible. En una sartén poner un poco de aceite a calentar a fuego medio. Cuando este caliente, añadir los espárragos y salarlos. Taparlos y hacerlos durante 10 m o hasta que estén dorados. Servir calientes.