Es un preparado culinario de origen francés, cuya base es la clara de huevo montada a punto de nieve, o la crema de leche batida, los cuales le dan consistencia esponjosa. La textura diferencial del mousse se debe a las claras batidas a punto de nieve y su mezcla con la crema base de la que se parte. Es este merengue lo que confiere al mousse esa textura tan característica de diminutas burbujas.
3 manzanas golden, 1 limón, canela en polvo, 2 claras de huevo, 4 cucharadas de jalea de frambuesa.
Descorazonar y pelar las manzanas y cortarlas en laminas gruesas. Ponerlas en una cacerola con medio vaso de agua, el zumo del limón y la canela y dejarlas coser a fuego medio hasta que estén deshechas. Aplastarlas hasta obtener una compota.
Batir las claras a punto de nieve, y añadir la jalea. Mezclar suavemente con la compota, así evitamos que se nos baje el mousse.