El boletus es un género de hongo del que hay unas 300 especies. La mayoría, son comestibles y muy apreciadas en la gastronomía.
600 ml de leche, 250 gr de boletus, 60 gr de harina de fuerza, 1 cebolla, 2 chalotas, 2 dientes de ajo, aceite de oliva, pimienta negra molida, sal, perejil, harina, pan rallado, 4 huevos, aceite de freir.
Picar las chalotas y los ajos fijamente. Ponerlos a pochar en una cazuela con aceite. Sazonar al gusto y dejar cocinar hasta que estén en su punto. Limpiar los boletus y picarlos finamente. Agregar a la cazuela, salpimentar, agregar perejil picado y cocinar un par de minutos.
Añadir la harina, rehogarla y verter la leche (previamente calentada), poco a poco, sin dejar de remover. La masa estará lista cuando esté compacta y se despegue de las paredes de la sartén. Pasar la masa a una fuente amplia, que antes habremos untado con aceite. Tapar con film y meter en la nevera para que se enfríe.
Una vez fría, formar las croquetas y pasarlas por harina, huevo batido y pan rallado para rebozarlas. Freírlas en aceite bien caliente hasta que estén doradas. Servir calientes.